¿DÓNDE ESTÁ LA POLÍTICA ECONÓMICA?
La economía siempre ha sido uno de los platos fuertes de la política socialista.
Los seguidores de las doctrinas de Marx siempre participaron de su idea de que la economía era el motor de la historia, y en aquellos tiempos de socialismo marxista la política socialista no tenía cabida fuera del dirigismo económico.
Vino después el progresivo abandono de las tesis marxistas tras constatar su inviabilidad y el nacimiento de la socialdemocracia, que tomó prestadas rectas económicas de aquí y de allá, dando lugar a lo que se ha dado en llamar la economía social de mercado, y que no es
sino un reconocimiento vergonzante de que la única economía que se ha demostrado válida es la de mercado.
El socialismo español ha recorrido, con mejor o peor aprovechamiento, a lo largo de sus historia este camino, permaneciendo sin embargo en muchos de sus militantes, tics de épocas pasadas y posos de doctrinas periclitadas.
Después de la impecable política económica desarrollada durante el gobierno del Partido Popular, que por cierto supuso sacar al país del pozo en que anteriores gobiernos le habían metido, sanear su economía y cumplir sus compromisos internacionales; era un reto nada fácil hacerse cargo de la economía española.
Sin embargo ver al frente de la economía a dos personas de contrastada experiencia en esta materia como Solbes y Fernández-Ordóñez, a quienes se añadió un joven y prometedor economista catalán como David Vegara, creaba ciertas expectativas y parecía confirmar que con la línea económica anterior no se iba a romper drásticamente.
Han pasados seis meses desde entonces y a estas horas deberíamos estar discutiendo sobre como lo han hecho, cuales han sido sus éxitos, cuales sus fracasos, pero resulta absolutamente grave que a estas alturas no podamos comentar nada, que sucede ?, es que no hay política económica?.
La explicación parece radicar en que el Sr. Rodriguez Zapatero ha formado un gobierno asimétrico, en el que muchos de los Ministerios de la esfera económica: Agricultura, Sanidad, Vivienda, Obras Públicas, Industria, han sido encomendados a personas de dudosa formación y falta de competencia en esos temas y que la cúpula del Ministerio de Economía está más ocupada en deshacer los entuertos que le llegan de estos Ministerios que en realizar una política económica de altura.
Sin embargo esta situación tan obvia, parece que no lo es tanto a ojos del Sr. Rodríguez Zapatero,por fijar unos ejemplos, en el tema de horarios comerciales prefiere darle antes la razón a Montilla que a Solbes y es incapaz de aceptarle la dimisión a la pobre ministra
Trujillo, tras todo un rosario de despropósitos e incompetencias en su gestión.
Convendría que Zapatero meditase que es lo que prefiere, si un gobierno de mediocres o dejar que la cúpula de Economía nos demuestre que política económica es capaz de hacer, porque si noes así, Solbes y su equipo se van a cansar pronto de hacer política de apagafuegos.
Sr. Zapatero, parece que no tomó Vd, o no aprovechó sus lecciones de economía, no lo demore más o su incompetencia la pagaremos todos.
Los seguidores de las doctrinas de Marx siempre participaron de su idea de que la economía era el motor de la historia, y en aquellos tiempos de socialismo marxista la política socialista no tenía cabida fuera del dirigismo económico.
Vino después el progresivo abandono de las tesis marxistas tras constatar su inviabilidad y el nacimiento de la socialdemocracia, que tomó prestadas rectas económicas de aquí y de allá, dando lugar a lo que se ha dado en llamar la economía social de mercado, y que no es
sino un reconocimiento vergonzante de que la única economía que se ha demostrado válida es la de mercado.
El socialismo español ha recorrido, con mejor o peor aprovechamiento, a lo largo de sus historia este camino, permaneciendo sin embargo en muchos de sus militantes, tics de épocas pasadas y posos de doctrinas periclitadas.
Después de la impecable política económica desarrollada durante el gobierno del Partido Popular, que por cierto supuso sacar al país del pozo en que anteriores gobiernos le habían metido, sanear su economía y cumplir sus compromisos internacionales; era un reto nada fácil hacerse cargo de la economía española.
Sin embargo ver al frente de la economía a dos personas de contrastada experiencia en esta materia como Solbes y Fernández-Ordóñez, a quienes se añadió un joven y prometedor economista catalán como David Vegara, creaba ciertas expectativas y parecía confirmar que con la línea económica anterior no se iba a romper drásticamente.
Han pasados seis meses desde entonces y a estas horas deberíamos estar discutiendo sobre como lo han hecho, cuales han sido sus éxitos, cuales sus fracasos, pero resulta absolutamente grave que a estas alturas no podamos comentar nada, que sucede ?, es que no hay política económica?.
La explicación parece radicar en que el Sr. Rodriguez Zapatero ha formado un gobierno asimétrico, en el que muchos de los Ministerios de la esfera económica: Agricultura, Sanidad, Vivienda, Obras Públicas, Industria, han sido encomendados a personas de dudosa formación y falta de competencia en esos temas y que la cúpula del Ministerio de Economía está más ocupada en deshacer los entuertos que le llegan de estos Ministerios que en realizar una política económica de altura.
Sin embargo esta situación tan obvia, parece que no lo es tanto a ojos del Sr. Rodríguez Zapatero,por fijar unos ejemplos, en el tema de horarios comerciales prefiere darle antes la razón a Montilla que a Solbes y es incapaz de aceptarle la dimisión a la pobre ministra
Trujillo, tras todo un rosario de despropósitos e incompetencias en su gestión.
Convendría que Zapatero meditase que es lo que prefiere, si un gobierno de mediocres o dejar que la cúpula de Economía nos demuestre que política económica es capaz de hacer, porque si noes así, Solbes y su equipo se van a cansar pronto de hacer política de apagafuegos.
Sr. Zapatero, parece que no tomó Vd, o no aprovechó sus lecciones de economía, no lo demore más o su incompetencia la pagaremos todos.
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