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FORO LIBER@L

Week end en Mundo Felíz

Anoche hablábamos en el chat de Un Mundo Feliz y de 1984, obras que yo en mi incultura confundí. Pero tanto da: las tenemos encima, las vivimos, y hay zonas de España en las que la creación de una conciencia colectiva, el adoctrinamiento constante de las masas en un determinado sentido alcanza tales grados de obsesión que acaba llegando a límites que podemos calificar de abiertamente fascistas.

Recordaréis los más ancianos las demostraciones sindicales, los festivales de coros y danzas, los desfiles, las campañas publicitarias estatales para hacer gimnasia (Contamos contigo), y toda la parafernalia típica de régimen autoritario con que la única televisión de entonces nos bombardeaba en sus escasas horas de emisión. Pues bien, voy a resumiros lo que he podido observar en simple fin de semana de no muy intensa contemplación televisiva en nuestros canales locales y autonómicos.

En Canal33 (la 2 de TV3) nos han obsequiado con una larguísima competición de castellers (ya sabéis, esos que se encaraman unos sobre otros hasta formar torres inverosímiles) que abarcó todo el sábado por la tarde. El domingo, una exhibición de bailes regionales y otras tradiciones locales también inacabable.

TV3 transmitió uno de los partidos que el Barça, que está de bolos, juega por Cataluña. Apasionante, por otra parte: Barça - Figueras, o Barça -Banyoles. Pues bien, al iniciarse el partido saltan al terreno de juego ambos equipos arrastrando entre ellos una inmensa senyera. ¿Os imagináis la que se armaría si el Real Madrid y el Torrelodones salen al campo con una desproporcionada bandera española?

Entre programa y programa, en medio de los anuncios, hay unos microespacios publicitarios de la Generalitat en los que diversos extranjeros de las más exóticas procedencias nos explican cómo se han integrado y nos dan su versión, en su voluntarioso idioma catalán, de un refrán o dicho local, y de lo muy felices que son al haber sido tan bien aceptados aquí por el hecho de haber aprendido frases como "de mica en mica s'omple la pica".

En el programa de Fuentes se entrevista a algún famoso. Una de las atracciones es una señorita que, en plan jocoso, interviene al final de la entrevista poniendo en evidencia, con humor blanco y no agresivo, las incorrecciones lingüisticas del entrevistado. El otro día le tocó al pobre Gaspart, quien al final tuvo que excusarse alegando que cuando él era joven estaba prohibido hablar catalán, y haciendo firmes promesas de apuntarse a un cursillo.

Dejemos la tele. En el pueblo donde veraneo (delicioso y anticuado verbo) se celebra por estas fechas un festival de teatro de humor. En el programa de mano aparecen las compañías y actores intervinientes, con una pequeña reseña y su procedencia: Australia, Italia, Méjico ,... Cataluña. Y voy yo y ojeo más rápido a ver si aparece "España" como algo diferenciado. No. Eso sí, hay compañías de Extremadura, Canarias, etc. Claro, había olvidado que España no existe.

Otra de Maragall: como recordaréis, aquí se han vituperado hasta la desesperación los desfiles militares, hasta el punto de que Trillo organizó uno casi clandestino en una callecita de Montjuïc en que apenas podían maniobrar los camiones (yo asistí, disfrazado). Pues bien, este año el Molt Honorable ha decidido celebrar el 11 septiembre en la Ciudadela con ¡una parada de los Mossos d'Esquadra! Esto, un fin de de semana cualquiera en el oasis catalán. Omito, por no hacerme pesado, las 250 proclamas de líderes políticos en los telediarios insistiendo en que lo único importante de la Contitución europea es que recoja el uso del catalán. Y un par de "debates" sobre la perentoria necesidad del estatuto nuevo, sin voces discrepantes, porque como todos sabemos no existen.

Cataluña, un mundo feliz. Qué bien.

1 comentario

Policronio -

Muy buen resumen el que has elaborado. Felicidades.

La denuncia del adoctrinamiento, único método de los nacionalistas para lograr lo que ellos mismos llaman "voluntad de ser", me parece imprescindible para desmontar, algún día, el tinglado de los totalitarios. Ánimo a los que como tú, desde Cataluña, soportáis lo peor de ese nacionalismo incesante.