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FORO LIBER@L

Tristes estadísticas

Ayer si hicieron públicas unas tristes estadísticas respecto al aborto en España. Quisiera hacer una breve reflexión acerca de las mismas.

Según parece, entre las mujeres menores de 20 años se produjeron unos 10700 abortos durante el 2002. De ellos, unos 10600 y pico, el 99.5% se acogieron al primer supuesto (peligro físico o psíquico para la madre), unos 40 fueron por mal formación del feto y 3 casos por violación. Los supuestos de mal formación del feto y violación solo representan el 0.5% de abortos totales en mujeres menores de 20 años.
Aun asumiendo que muchas chicas que se acogen al primer supuesto hayan sido violadas y no lo quieran reconocer y aun asumiendo que es difícil saber que porcentaje representa eso los números siguen siendo bastante claros.
Es difícil pensar que haya tantos casos de riesgos físicos en mujeres jóvenes. Tantos para justificar un aumento del 87% de abortos en el periodo 95-2000 (si no recuerdo mal). Más bien pienso que se acogen al riesgo psíquico. Es decir, al problema psicológico de un embarazo no deseado después de no haber pensado para nada en los métodos anticonceptivos. Así, no creo que sea exagerado decir que ahora mismo el aborto se está utilizando como método de planificación familiar. Es decir, se cubre la irresponsabilidad con un asesinato gratuito. Suena fuerte decir eso. Pero eso son los hechos.
Existen muchos métodos anticonceptivos. La información circula libremente como para que se pueda justificar, a estas alturas, este comportamiento medieval e inmaduro.
Es muy triste pensar que nuestra sociedad, que ha llegado a un nivel educativo e informativo elevado, el más alto de su historia, siga recurriendo al asesinato del no-nacido para controlar su falta de responsabilidad en su comportamiento sexual.

11 comentarios

Anónimo -

Se justifica la violencia destructora de humanos no-nacidos con los mismos y antiguos argumentos usados por hombres que se disculpaban por su menosprecio, el rechazo, abuso y la violación perpetuada hacia mujeres a través de la historia humana. Las mujeres que no aceptan que los valores de la mujer sean medidos por cuanto un hombre desea su cuerpo o necesita sus servicios, ahora demandan que el no-nacido sea juzgado por los mismos estándares. Toda feminista desea un mundo en que la violencia contra las mujeres sea no sólo condenada legalmente sino también considerada impensable social y moralmente. Ojalá que los defensores del aborto, algún día se den cuenta de que los niños no-nacidos tampoco son propiedad y que la violencia contra éstos es igualmente inaceptable. Ojalá no tengamos que dejar pasar otros 150 años a fin de establecer que los niños que llevamos en nuestros senos también son personas

iñaki -

así que todos contra la violencia de género, pero pasamos de la violencia en el útero... manda eso la cosa. para que se enteren los que no lo saben hay más violencia en los úteros de las españolas que en todo el irak.

bastiat -

Pero lo verdaderamente sorprendente de su argumentación es el equiparar al feto con un pollo por el mero hecho de dudar de la infalibilidad de que el feto o embrión no sea más que una potencialidad de ser humano. Quizás lo que deberíamos pensar es porqué se piensa en que un feto es potencialmente humano y no potencialmente un pollo, una sandía o una seta. Yo, por mi parte tengo muy claro que en el momento en el que una mujer, único medio actual en la tierra de conseguir seres humanos viables y, por ahora, moralmente admisible, siente que ha concebido un hijo, no un feto, sino un hijo, a partir de ese momento es cuando se empieza a plantear la posibilidad del aborto. Si no fuera potencialmente un ser humano no sería potencialmente posible abortar. Pero lo que es indudable es que la potencialidad del aborto se convierte en certeza cuando se toma esa decisión. Con lo cual he de aceptar que sí, lo que antes era un feto, por la intervención de alguien externo al proceso de la procreación, pasa a ser un proyecto de ser humano que ha perdido su potencialidad para dejar de ser efectivamente materia viva.

Lo que es indudable, es que su madre, como la mía tuvieron la certeza en el momento que sintieron que estaban embarazadas, de que iban a tener un hijo, no una sandía, una seta o un pollo. El hecho de que nos separen del chimpancé sólo un 5% de genes no nos convierte potencialmente en chimpancés, ni tan siquiera en el caso de que la perversión de alguno le lleve a copular con una mona.

bastiat -

Estimado Milton:

Entiendo que dar calificativo de asesinato algo que siempre ha consistido en que un ser humano quita la vida a otro teniendo plena conciencia de lo que hace, y teniendo presente la vida del otro siendo éste sujeto de defensa de la ley por convencimiento moral, es posible que hablar de asesinato no sea posible. Pero ¿porqué hace moralmente deplorable la muerte a manos de otro ser humano la vida de un nacido, y siendo escrupulosos con el código civil, transcurridas 24 h desde el nacimiento, y no lo hace siendo antes de dicho plazo?

Si la moral es algo que permite la elaboración de leyes para defender lo que la moral defiende, la moral debería de explicar por qué usamos recursos lingüísticos y recovecos legales para negar tal defensa a un embrión.

asisi -

El hombre se define por su constitución, que posee desde que es concebido, y no por su morfología o funciones . El hombre no posee otra modalidad de existencia que la de ser persona (ser individual de naturaleza racional) . El feto no es potencialmente una persona o “una persona potencial”. No existen “personas potenciales”, como no existen “pájaros potenciales”. Sí existen gametos que pueden llegar a ser una persona humana, pero los gametos no constituyen un individuo de la especie humana. El feto no es una persona potencial, sino que es actualmente una persona humana, con potencialidades todavía no actualizadas. Por tanto no se trata de un desarrollo “hacia el ser hombre”, sino del desarrollo “de un ser humano”.

Milton -

Una vez dicho ésto, considero un desproposito estar en contra del aborto argumentando asesinato, dado que me temo que las nociones antropológicas y filosóficas no apuntan mucho hacia la equiparación del a vida humana con la vida biológica. Y en caso de hacerlo, conscientes de que el feto devendrá en una vida humana ¿no estamos castigando el crimen contra la potencialidad y no contra la vida? ¿no resultaría un poco arbitrario y carente de fundamentación dotar de derechos a un feto, y no así a un pollo? ¿la potencialidad es sintoma de infalibilidad?

Milton -

Asisi:

La cuestión no es tan sencilla como determinar si la vida humana es un valor en sí o lo es en función del adulto. Y es porque la vida humana tiene una serie de rasgos distintivos que la hacen diferente del resto de vidas. A encontrar dichos rasgos se dedica la antropología y en no pocas ocasiones la filosofía. Es decir, la vida humana es un hecho radicalmente distinto y, por ahora, único en la faz de la tierra. Deberemos de ocuparnos de que elementos configuran la vida humana para poder distinguirla y, por tanto, dotarla de dignidad y derechos.
Teniendo en cuenta, por ejemplo, que la diferencia genética que nos distingue de los chimpaces es mínima (inferior al 5%) y no mucho mayor la que nos aleja del cerdo o del gusano, deberíamos darnos cuenta (dado lo radicalmente distintos que somos de cerdos y gusanos) que el hecho de ser un ente biológicamente vivo que evoluciona según el dictado de un código genético (como lo es el zigoto o el feto) no es razón suficiente como para dotar de dignidad o derechos naturales a un ente.
Es más, en la medida en que las investigaciones científicas continúen demostrando nuestra continuidad genética con otros entes vivientes, deberíamos de ir fundamentando cada vez menos la noción de vida humana refiriendonos al ADN.

asisi -

Lo que hay que determinar es si el aborto entraña la eliminación de una vida humana, y, sobre eso, por más disquisiciones que se quieran hacer, no caben dudas. La protección de la vida humana, que es uno de los fines fundamentales del derecho. La polémica sobre el aborto es una cuestión en la que se encuentran en conflicto quizás dos concepciones antagónicas acerca del valor de la vida y de su dignidad. Para unos es un valor fundamental que debe ser protegido sin excepciones. Para otros, parece tratarse de algo así como de un valor especial, y sobre el que deben prevalecer la libertad y el bienestar de los adultos o la salud de otras personas". He aquí el problema, ¿la vida humana es un valor en sí o lo es en función del adulto?.

jarim -

propongo una reflexión de lo más simple una bofetada puede ser delito ó falta, en cambio MATAR a un ser humano es algo que puede proteger la ley y además si alguien se niega a ejercer de verdugo, incluso puede ser sancionado.
se diría que alguien pretende volvernos esquizofrénicos.
creo que he tenido un momento de lucidez para darme cuenta de ello y lo aprovecho para reivindicar que el aborto (por lo menos) se incluia en la ley de violencia de género, que menos no?

jarim

Milton -

Pues yo creo que la distinción fundamental reside en lo siguiente: Somos seres humanos. Existe una controversia tremenda en torno a la noción de cuando somos seres, es decir, cuando somos biológicamente entes vivos. A pesar de ello, podemos aceptar en términos de este debate que somos seres desde el momento en que existe el zigoto. Pero no podemos olvidar que en tanto que seres, las diferencias con respecto al resto de entes vivientes son ridículamente nimias. Es más, las tremendas similitudes que muestran los genomas de distintos entes vivos debería de hacernos reflexionar sobre si el hecho de ser entes vivientes biológicamente nos hace portadores de derechos naturales, como el derecho a la vida. Porque rápidamente nos tendríamos que preguntar en función de qué es por lo que damos dicho derecho al zigoto y no se lo damos a otros entes biológicamente vivientes como un pollo. Sinceramente, parecería un poco arbitrario y caprichoso decir que justo las características concretas que recoge el zigoto humano son las únicas que pueden dar lugar a un derecho a la vida. Es por ello que uno debe de centrarse no en lo que nos convierte en seres, sino en humanos. Y este no es un campo tan sencillo, y la antropología y la filosofía tienen eternas disputas en torno a ello, lo que impide delimitar claramente en que momento se produce una violación de la ley natural. Y ojo, todo ello pàrtiendo de supuestos iusnaturalistas en consonancia con una importantísima rama del liberalismo, mismos que a mi me convencen poco.

asisi -

El aborto es un crimen, además de una auténtica catástrofe física y psíquica para la mujer que lo sufre. En todos los casos. Por mucho que le demos vueltas, el hecho es que una vida indefensa es interrumpida violentamente y una madre en ciernes sufre una intervención cruenta que, en el mejor de los casos, sólo le dejará secuelas psíquicas. Aquí se trata de debatir si, en determinados casos, el Estado debe renunciar a castigar penalmente a los responsables de tal crimen. Pero de ahí a estar "a favor" de tal barbaridad, va un abismo.
Los que defienden la 'interrupción del embarazo' deberían tener la valentía de llamar a las cosas por su nombre: están defendiendo la pena de muerte para un ser humano inocente. Sí, un ser humano, pues desde el momento de la concepción el cigoto es una entidad viviente que se desarrolla siguiendo las directrices de sus propios genes. ¿En qué momento consideran los abortistas que comienza a ser considerado ese ser un humano? ¿En el momento en que la madre lo expulsa de su útero? ¿Cuando comienza a hablar? ¿Cuando comienza a sonreír (cosa que hace ya en el vientre materno)? La vida del nonato no es propiedad de su madre.